LA ACACIA Y SU SIMBOLISMO EN EL GRADO DE MAESTRO* MVM.:. Y MV.:.HH.:. todos: En esta plancha quiero dejar plasmado un breve trabajo investigativo que surgiera de un conjunto de inquietudes relacionadas con el significado de la muerte en la iniciación y posterior concepto de inmortalidad del alma en la exaltación a Maestro Mason. A tales efectos voy a describir algunas consideraciones sobre este poderoso símbolo que los masones de todo el mundo han estudiado en sus talleres por muchos años; LA ACACIA conocida también como vachelia; es una planta con enormes variantes dependiendo del lugar del mundo en el que nos situemos. De hecho existen entre 1400 y 3000 especies en todo el planeta. Aunque la mayoría de las variedades de acacia son originarias de Oceanía, hay algunas pocas especies de acacia en África, el lugar que nos interesa para fines de la masonería.
La acacia tiene cientos de variantes dependiendo del lugar en el que se encuentre. De hecho es casi imposible encontrar uniformidad dentro de esta planta.
Dentro de las variedades más comunes de acacia podemos encontrar a la acacia morada, la acacia de la india, la acacia seyal.
Y, por supuesto, la acacia tortilis o acacia africana. Esta última planta es la más común en el norte de África y el Oriente Medio, lugar donde se desarrollan las leyendas masónicas de la construcción del Templo de Salomón y la Leyenda del Maestro constructor Hiram Abiff. En esta cámara nos resulta familiar por la leyenda del tercer grado o la leyenda de Hiram Abiff y los compañeros traidores. La leyenda completa se encuentra reservada a los Maestros Masones; pero para efectos prácticos, vale la pena mencionar que la acacia juega un papel muy importante en el desenlace de la leyenda de Hiram Abiff.
Una rama de acacia fue colocada en el lugar donde fue reconocido el cuerpo material del Maestro Hiram, para indicar a los demás obreros el lugar donde buscar posteriormente. Es por esta razón que además de ser un símbolo masónico, tiene un valor muy especial para muchos de nosotros y de connotaciones sagradas para algunos miembros de la orden. La acacia me es conocida Se trata de una frase utilizada en algunos rituales masónicos para realizar la apertura de los trabajos del tercer grado masón o grado de Maestro Masón. Esta frase es parte de una serie de preguntas que son utilizadas como mecanismo de apertura.
El significado de la frase ‘ la acacia me es conocida ‘ tiene una relación directa con el “conocimiento” que se tiene respecto de la leyenda hirámica.
En otras palabras, lo que el Masón que pertenece al Tercer Grado está diciendo realmente, es que conoce la leyenda del tercer grado de la masonería; y que, por lo tanto, tiene permitido estar presente en los trabajos de este grado.
La acacia como simbolismo esotérico La planta de la acacia ha tenido diversas interpretaciones a lo largo de la historia, la mayoría de estas interpretaciones tienen una relación con escuelas de pensamiento afines a la masonería, aunque existen sus excepciones.
Algunas escuelas iniciáticas utilizan a la acacia como una planta sagrada representativa de la transmutación de las cosas; un indicativo de que el alma trasciende a los sucesos de nuestro mundo y que es posible pasar a otros planos de existencia con ayuda de esta planta.
Desde un punto de vista metafísico la acacia representa el paso de nuestra vida presente a un estado de la materia en donde nuestra alma se integraría con el todo; una forma de analizar nuestra misma existencia desde la perspectiva de otras corrientes de pensamiento, independientemente de la interpretación de los hermanos. En estos últimos conceptos enunciados he querido dejar plasmado un sentido de tolerancia de pensamiento y aceptación de las ideas que cada miembro asume de este SIMBOLO.
En este sentido, en las logias habrá hermanos que optan por creer en las propiedades de la metafísica, la gnosis o la alquimia; y sepamos que todas las ideas se deben respetar. Esto último sí es meramente masónico, pues la libertad de pensamiento es, ante todo, el estandarte que debe enarbolarnos.
La acacia como significado espiritual A diferencia de los significados que se le dan en otras escuelas iniciáticas, la acacia sí tiene un significado espiritual para muchos masones. Se trata de hermanos que han decidido ver en la leyenda de Hiram, un consuelo o una filosofía de vida (y de muerte).
Estos hermanos consideran que esta planta sí es un símbolo de la inmortalidad del alma, aunque no descrita como una forma de trascendencia a otros planos de existencia, sino como un recuerdo de que aquello que trasciende es la idea. Y que, si la idea, si el verbo, no muere, entonces el alma tampoco lo hará.
Se trata de una bella forma de afrontar no sólo nuestra propia muerte, sino la de nuestros seres queridos. A final de cuentas, la masonería en su infinito contenido simbólico, tiene como objetivo, explicar lecciones morales a través del simbolismo.
CONCLUSIONES FINALES: Después de varios días de investigación, lectura y reflexión sobre este tema, y que en ocasiones llegara a querer desistir de su abordaje, he logrado equilibrar mis pensamientos y permitirme una apertura de conciencia suficiente para que este símbolo pueda trabajar en mi, y en ustedes. La acacia tiene un significado masónico ligado no sólo con la leyenda del tercer grado o la leyenda del Gran Maestro Hiram Abiff; sino que además, representa uno de los ideales masónicos e iniciáticos más valiosos, la inmortalidad del alma, lo efímero de nuestro paso por este viaje, la propuesta de la muerte en nuestra iniciación, el camino sinuoso de los grados anteriores, la lucha permanente e inflexible que debemos darnos con nosotros mismos, con nuestras miserias, combatir nuestras imperfecciones, como nos enseña la leyenda de los compañeros, la ambición, la envidia, los galardones materiales, la intolerancia de los pensamientos y de de las acciones, el poco reconocimiento del esfuerzo de nuestros hermanos, no saber aprovechar la inteligencia colectiva de los talleres para nuestros propios logros. Y por ultimo el mas atroz de todos, EL EGO, esa acrimonia del ser humano, difícil de erradicar y que debemos matar, y que morirá como el GRAN MAESTRO HIRAM. Este trabajo QQHH me ha llevado a profundos sentimientos de humildad, desde el concepto de lo que realmente somos, y que dejaremos a nuestro paso!!, ¿, somos acciones, somos el cariño que brindamos y lo que hacemos por los demás, nuestra palabra, nuestras vivencias, la sumatoria de valores cualitativos de nuestra conciencia transmutaran en aquellos que en el camino fuimos tocando y en la impronta de inmortalidad de nuestra alma, y si logramos dejar una minúscula partícula de nuestra esencia divagando por el infinito, siempre brillara la esperanza de mejores hombres.
P. Q.
